Es una historia incierta y dudosa de amistad, que comienza con un gag fácil y tonto, pero efectivo. Charli (Mauro Muñiz) y Umberto (José Luis Gil) o el famoso Señor Cuesta, aunque apuntaría por un nuevo personaje….El doble de Rubalcaba.
Bueno bromas aparte, estos dos tipos, utilizan un bar/pub cerrado para desarrollar la acción de esta comedia digerible, agradable y como digo, muy efectiva. La risa aparece a menudo y también la sonrisa, pese a la carencia técnicas y unas flojas transiciones que se perdonan sobre todo, por la excelente interpretación de Rubalcaba, perdón…Umberto. Que no solo con su modulación de la voz, sino con sus gestos y formas atrapa a un patio de butacas que estaba prácticamente lleno.
La obra está escrita por el propio Mauro a dúo con la también monologista Carolina Noriega y pese a tener una buena idea, quizás le falte como a mí, afinar mas y perfilar en los escritos. Pero como digo, con toda esta disección, me gusto, me reí y a mi compañero de butaca y amigo, Don David Barbero que además de periodista y comentarista teatral, es el autor más premiado por sus numerosas obras de teatro escritas, le gusto también.
Coincidimos en los matices y apuntamos el nombre de José Luis Gil, como posible candidato a la Tertulia Teatral que todos los últimos de lunes se celebra en Larruzz, con los miembros de Escena S.21
Obra recomendable aunque bien podían recortar unos veinte minutos de más que tiene por ese recurso audiovisual que utilizan para justificar parte de la trama. Obra llena de tópicos típicos, pero…..Que difícil es ser original hoy en día…por qué ser original, significa ir a los orígenes y mucha gente no sabemos ni donde los tenemos, aunque pase todos los veranos de mi vida en Samboal.
JabierCalle